Siempre es duro terminar un trabajo, dejar a unos compañeros que te han tratado como a uno más y despedirte seguramente para no volverles a ver. Hoy me acaba mi etapa en Hobby Consolas, una revista de videojuegos que yo mismo compraba de pequeño para pasarme las pantallas de The Legend of Zelda: Ocarine of Time y con la que ha sido un gusto estar colaborando activamente los últimos meses.
Tengo mucho que agradecer, después de una selección bastante dura en el que tuve que pasar por diversos procesos, Hobby Consolas apostaba por el entretenimiento como un claro exponente de la cultural actual del siglo XXI. Y entre ellos, apostaba por mí como “especialista” en series de televisión y cine que se haría cargo de comandar las noticias de actualidad todas las mañanas.
No tengo que deciros que he estado en mi salsa, escribiendo de lo que más me gusta y ayudando en temáticas que no hubiera imaginado como manga o cómics. Es un placer cuando te dan carta blanca para desarrollar tu trabajo, te dejan hacerlo y te felicitan por él casi cada día. Así es como se debería tratar a los colaboradores en todas partes ya sean parte del equipo de redacción o no. Por ello ¡¡muchas gracias!!
Sé que esto no es un adiós. Cuando has estado colaborando y te llevas tan buen sabor de boca de unos compañeros amables que han hecho todo lo posible para ayudarte y de unos jefes que han estado contentos con su trabajo; sabes que en el fondo nuestros caminos volverán a encontrarse. No sé ni cómo, ni dónde, ni cuándo pero sé que lo harán.
¡Hasta siempre Hobby Consolas!