Saltar al contenido

Carta a los Reyes Magos

Reyes Magos

Queridos Reyes Magos:

Este año he sido bueno. He querido a los míos, he luchado por mis sueños, he reído y he llorado tanto de felicidad como de pena, pero lo he hecho sabiendo que es sano hacerlo de vez en cuando. He sustituido las malas formas por una charla racional, he tenido hablar siempre que ha sido necesario y he intentando ser coherente en todas las situaciones en las que me he encontrado. A pesar de todo ello, no quiero nada material. En realidad, no lo necesito.

Como todos, también me gustarían cosas como un móvil de esos con manzanita, una televisión de última generación que parezca un cine, un nuevo sofá más grande y más cómodo o un coche que consuma menos. Sin embargo, no me hace falta. Me considero una persona afortunada. Tengo personas que me quieren, que me aprecian, que me siguen y que me acompañan en cada paso del camino. Gente que me valora, que me ayuda, que me aconseja y que me echa la bronca cuando es necesario. Aun así me gusta pedir alguna cosa, de esas que no se pueden comprar con dinero y son necesarias pero no solo para mí…

Me gustaría pensar más en lo que sienten los demás. No hace falta ser muy listo para observar el comportamiento de la gente y la forma de decir las cosas. Las formas a veces lo son todo y una frase dicha de una determinada manera suponer un cambio radical. Aprender a usarlo de la manera adecuada es aprender a no hacer daño. Porque aunque los sentimientos no se pueden controlar, se puede ser sincero sin herir o al menos intentando no hacerlo.

Me gustaría respetar más. El respecto es el valor que mueve el mundo. Somos diferentes, pensamos diferente, comemos diferente, nuestras culturas son diferentes, racionalizamos de manera diferente y en esa diversidad está nuestro crecimiento como personas. Debería importarnos muy poco lo que los otros hagan, piensen o sientan si son realmente felices. Respectar significa no compartir las mismas opiniones, ideologías o pensamientos; pero ver más allá y respectar su forma de ver la vida sin hacer daño al prójimo.

Me gustaría ser más valiente. El mundo es de los valientes, de aquellos que se arriesgan sin temor a las consecuencias. Porque fracasar, caerte y levantarte también es un aprendizaje y nadie dijo que fuera fácil emprender este camino.  Apuesta, arriesga y disfruta del trayecto porque la vida pone cosas en nuestro camino que rechazamos por no ser valientes. Y es mejor equivocarse por haberlo intentado, que arrepentirse de no hacerlo.

Me gustaría controlar mis miedos. Dar el salto, no pensar tanto las cosas y aventurarte a cumplir tus deseos sin importan los miedos. El miedo es sensación de angustia provocada por la presencia de un peligro real o imaginario. Muchas veces dejamos que los miedos nos paralicen y nos bloqueen cuando delante de nosotros no hay nada que nos freno, salvo nuestra imaginación. La mente puede ser poderosa y aunque tener miedo es racional, solo hay que saber controlarlo para que no se convierta en algo que te frene.

Me gustaría conocer más a los míos. Perdemos tanto tiempo en cosas que realmente no tienen importancia, que dejamos de lado a las personas que tenemos a nuestro alrededor. ¿Sabemos cómo vivieron nuestros abuelos la posguerra? ¿Qué soñaba nuestro padre con ser de mayor? ¿Cuál es el sueño de tu mejor amigo/a? Tal vez es el momento de dejar de prestar atención a lo no importante, recapacitar, apagar el móvil y preguntar simplemente lo que queremos saber sobre ellos…

Me gustaría poder cambiar las cosas. Desgraciadamente no puedo. Nadie me ha puesto en una posición privilegiada y necesaria para hacerlo. Soy una simple oveja en el rebaño donde los pastores nos gobiernan con mano de hierro, elegidos por el pueblo o autoimpuestos ellos mismos. Lo hacen más preocupados por el espectáculo y la confrontación en las tribunas donde todo el mundo les está observando; que en ayudar a cambiar las cosas que realmente son necesarias, y son muchas.

Queridos Reyes Magos, no he sido malo y no quiero grandes cosas. Sé que estos deseos son más difíciles de conseguir, porque eso mi carta puede valer para el año que viene, y el siguiente, y el siguiente, y el siguiente. Espero que con el tiempo todos nos demos cuenta que a veces hay que poner más de nuestra parte si queremos vivir en un mundo mejor.

2 comentarios en «Carta a los Reyes Magos»

  1. Los regalos que propones son los que todos deberiamos tener en cuenta y dejarnos de tantos aparatos y bienes materiales que, si bien pueden ser una via de escape para nuestros problemas, no lo son todo en la vida.
    En tu carta a los Reyes comparto varios deseos. Entre otros el ser más valiente y atreverme a saltar a la piscina en muchas situaciones, aunque tenga realmente miedo…
    El miedo…esa bestia que nos ahoga y nos impide crecer como personas. Ese miedo es uno de mis caballos de batalla, que espero vencer este año.
    Pero, de lo que estoy realmente seguro es de que soy afortunado de tener a personas maravillosas a mi lado y amigos incondicionales que me ayudarán a levantarme cuando me caiga en ese pozo de oscuridad en el que muchas veces nos vemos sumidos.
    Este carta me ha parecido sincera, auténtica, contundente y llena de verdad. Eso es lo que me animó a comentar.
    Espero ser testigo de tu carta para el próximo año, porque tus palabras me ayudan, y ayudarán a mucha gente, a abrirnos los ojos y darnos cuenta de lo verdaderamente importante.
    Solo puedo decir que espero que tus deseos se cumplan.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *